Los árboles son un importante componente del paisaje natural debido a que previenen la erosión y proporcionan un ecosistema protegido de las inclemencias del tiempo en su follaje y por debajo de él. También desempeñan un papel importante a la hora de producir oxígeno y reducir el dióxido de carbono en la atmósfera, así como moderar las temperaturas en el suelo. También, son elementos en el paisajismo y la agricultura, tanto por su atractivo aspecto como por su producción de frutos en huertos de frutales. La madera de los árboles es un material de construcción, así como una fuente de energía primaria en muchos países en vías de desarrollo. Los árboles desempeñan también un importante papel en muchas mitologías del mundo.
La raíz es una parte de la planta de difícil acceso debido a que se encuentra bajo tierra. Cumple la función de otorgar soporte y anclaje al suelo, además de la absorción de agua y la captación de nutrientes.
El tronco, además de ser la parte central de la planta y sostener las ramas, actúa como canal de los nutrientes, distribuyéndolos por todo el sistema hasta la copa.
La copa son las ramas y hojas del árbol . Tiene la importante tarea de fabricar alimento para el árbol. Las hojas (las hojas de un árbol de hoja perenne son sus agujas) son pequeñas "fábricas" que producen alimentos utilizando agua absorbida por las raíces y carbono extraído del dióxido de carbono del aire.